7. sep., 2022
Córtale las uñas al estrés
Córtale las uñas al estrés
El término estrés es una adaptación al castellano de la voz inglesa stress, la cual hace referencia a “énfasis”, “tensión” o “presión”.
El estrés se refiere a los cambios físicos, psicológicos o emocionales en una persona.
Las principales causas del estrés en la vida moderna son: el dinero, problemas laborales o familiares, así como problemas de salud.
Es una reacción biológica ante situaciones adversas o peligrosas, en la que el cerebro segrega hormonas como el cortisol (encargado de aumentar la neurotransmisión) y la epinefrina o adrenalina.
Desde el punto de vista psicológico, puede ocasionar múltiples padecimientos, tanto leves como crónicos, por ejemplo la ansiedad y la depresión, también puede generar patologías sociales, como el aislamiento y la baja autoestima, inclusive problemas de carácter sexual, como la impotencia.
Síntomas del estrés
Los síntomas más comunes de esta enfermedad son:
1. Emocional: ansiedad o depresión, miedo, irritabilidad, nerviosismo, alteración del estado de ánimo, contusión, etc.
2. Pensamientos: excesiva autocrítica, desmedido temor al fracaso, olvidó, problemas para la toma de decisiones y concentrarse, pensamientos recurrentes.
3. Conductas: aumento del consumo de tabaco, risas nerviosas, maltrato hacia los demás, alcohol y otras drogas, llantos, incremento o disminución del apetito, prensar las mandíbulas, etc.
4. Cambios físicos: manos frías o sudorosas, rigidez muscular, insomnio, fatiga, dolores de cabeza, respiración agitada, sarpullidos, problemas en el cuello o espalda, difusión sexual, etc.
Tipos de estrés
Agudo
Es el tipo más común que se origina esencialmente como respuesta a una exigencia o presión específica, por lo que es de poca duración y es fácil de tratar y manejar. Se presenta con síntomas tensionales y cansancio, manos y pies fríos, sobre excitación, poca ansia o sentimientos depresivos.
Agudo episódico
Se trata de individuos que padecen de estados agudos de estrés de manera constante. Estas personas con frecuencia se perciben como si estuvieran atados a un círculo de excesivas responsabilidades, que los hunde en una vida desordenada, regidos por el condicionamiento autoimpuesto y envuelto en una crisis continua.
Las personas afectadas suelen tener un carácter irritable, agrio, bastante nerviosas y se hallan en un continuo estado de inquietud.
Crónico
Es un estado agotador, que causa un desgaste emocional y físico constante en las personas que lo padecen. La situación de pobreza, tener un trabajo que no le agrade, familias disfuncionales, son algunas de las circunstancias que pueden causar estrés de tipo crónico. Muchas veces este estado provoca pensamientos de suicidio, o da origen a la aparición de algunas enfermedades sistémicas, como la embolia.
Causas del estrés
Las causas que lo provocan son generalmente situaciones indeterminadas que producen un desgaste del organismo. Responde a situaciones de presión, cambios, exigencias y de retos a los que se enfrenta la persona todos los días.
Ejemplos:
1. En el trabajo mediante la influencia de diversos elementos, relaciones interpersonales con jefes y compañeros o por la misma naturaleza del trabajo.
2. En la familia mediante las presiones económicas, diferencias individuales no aceptadas, preocupaciones por situaciones de la comunidad, del país, etc.
3. Todas estas situaciones producen al individuo depresión, irritabilidad, insomnio, pérdida de capacidad intelectiva, frustración y agresividad.
Existen factores como el trabajo, la familia o situaciones personales que provocan gran tensión, los cuales causan en las personas un estado de malestar e inquietud que, en algunos casos, desatan graves afectaciones físicas, por ejemplo:
- Angustia.
- Dolor en la espalda.
- Estreñimiento o diarrea.
- Depresión.
- Dolores de cabeza.
- Presión sanguínea alta.
- Insomnio.
- Sensación de «falta de aire».
- Caída del cabello.
- Presión en el cuello.
- Malestar estomacal.
- Subir o bajar de peso.
- Cambios de humor.
- Presión de dientes o mandíbula.
- Fumar en exceso.
- Baja autoestima.
- Dificultad para relacionarse con los demás o en el trabajo.
- Problemas en diferentes áreas de la vida.
- Dificultad para tomar decisiones.
- Cansancio, fatiga o pérdida de energía
- Tomar más alcohol, tranquilizantes u otras drogas.
- La tensión muscular es sin duda uno de los síntomas de estrés más usuales que afecta más que nada el cuello y la espalda. Este estado ocasiona que los nervios se vuelvan más rígidos, haciendo que éstos, al mismo tiempo, contraigan los músculos y comprime las vértebras.
Existen otros tipos de estrés, como el laboral, postraumático, escolar, oxidativo, que igualmente se manifiestan con:
- Dolores musculares.
- Sueño anormal.
- Cambios en el peso y contextura física.
- Estrés cardiaco.
- Inapetencia.
- Agotamiento recurrente.
- Cambios físicos y en la personalidad del individuo.
Pero seguramente lo que más nos interesa es saber cómo podemos resolverlo y sentirnos mejor, así que les comentaré que existen algunas actividades para combatirlo
1. Meditación: es una de las mejores opciones para relajarse y alejarse de los medios estresantes de la vida cotidiana. La meditación ha sido utilizada para optimizar el estado de ánimo y llevar un estilo de vida saludable. Hay diversos estudios que comprueban los beneficios de la meditación en el cuerpo.
2. Yoga: el hacer ejercicio libera endorfinas las cuales son hormonas relacionadas con el buen humor y que causan una sensación de placer. Según ciertos estudios, realizar yoga posee los mismos beneficios: mejora la conexión del alma y el cuerpo, mejora y refuerza el ciclo del sueño, elimina el dolor y causa una sensación de amor al cuerpo.
3. Escribir: tener un diario es una opción excelente para eliminar el estrés y el nerviosismo. Cuando se tiene el hábito de escribir en un diario antes de ir a dormir, se comienza a ser más reflexivo sobre las emociones (positivas y negativas) y a reconocer el porqué de las emociones.
4. Ejercicio: hacer ejercicio, desde caminatas de 20 o 30 minutos al día o practicar deportes ayuda enormemente a sentirse mejor respecto al estrés. Además, como lo mencionamos en Yoga, hay liberación de endorfinas, las cuales nos hacen sentir bien.
5. Remedios caseros: también existen algunos remedios caseros para los que gustan de este tipo de soluciones, tales como los aceites esenciales, que son muy buenos relajantes, también existen tés e infusiones que ayudan a las personas a relajarse, podemos mencionar té de valeriana, manzanilla, gingseng, flor de la pasión, además de la dieta antiestrés de la escribiremos en otra ocasión.
Les deseo todo lo mejor en empezar a resolver el problema del estrés.
Córtenle las uñas!
Alfredo Alvarado Batres – Médico y Asesor en Estilos de Vida Saludables.